Ahora, los estudios muestran que los canabinoides directamente interfieren con la señalización del dolor en el sistema nervioso. Los descubrimientos podrían llevar a nuevos analgésicos.
Los estudios en animales están mostrando que los canabinoides pueden calmar al dolor interrumpiendo señales dolorosas en el sistema nervioso. Las nuevas investigaciones podrían llevar a:
· Estrategias para la manipulación de los canabinoides para evitar los efectos secundarios y calmar el dolor
· Avances en la comprensión de como funcionan los canabinoides en el sistema nervioso.
En el pasado, no existía evidencia que demostrara que los canabinoides podían calmar el dolor. La mayoría de los incidentes eran anecdóticos. Algunos estudios con animales sugerían que los compuestos podían influenciar el dolor, pero los investigadores no sabían si los canabinoides actuaban sobre el sistema del dolor directamente o si otros efectos de los compuestos eran los responsables de la analgesia.
Los canabinoides pueden inducir euforia y una gran variedad de efectos de comportamiento como cambios en la atención, déficits en el movimiento y trastornos cognitivos.
Durante la década del 80, los investigadores descubrieron que existía un sistema natural de canabinoides en el sistema nervioso. Hasta ahora, se han encontrado varias sustancias canabinoides en el cerebro. Estas sustancias son capaces de unirse a determinados sitios sobre las células, conocidos como receptores de canabinoides. Los derivados de la marihuana también actúan sobre estos receptores.
Las investigaciones recientes en animales sugieren que los canabinoides calman el dolor directamente interfiriendo con las señales de dolor en el sistema nervioso. En un estudio, los investigadores utilizaron un tipo especial de tecnología para analizar la actividad de células en la médula rostral ventromedial. Las células en esta región cerebral aumentan o disminuyen nuestro nivel de percepción de dolor. Las sustancias canabinoides activaban a las células que bloqueaban las señales del dolor e inactivaban las células que aumentaban la percepción del dolor.
Mientras que algunos científicos continúan identificando las áreas centrales involucradas en los efectos de analgesia por parte de los canabinoides, otros encuentran que estas moléculas también pueden actuar sobre los nervios que se extienden de la médula espinal. Por ejemplo, los investigadores descubrieron que las inyecciones de canabinoides naturales en el lugar de injuria en modelos animales produce analgesia. Se sospecha que los canabinoides bloquean el dolor aumentando la liberación de moléculas que son liberadas luego de una injuria e interfiriendo con una señal nerviosa de dolor antes de que llegue a la médula espinal.
Las investigaciones tempranas demostraron que los canabinoides podían ser efectivos para tratar la condición dolorosa conocida como dolor neuropático.
Los tejidos dañados de un dedo quemado liberan sustancias que estimulan las terminaciones dolorosas (1). Además, las señales dolorosas viajan por los nervios en el brazo hasta llegar a la médula espinal (2). Estas señales dolorosas se registran en las áreas del tálamo y corteza cerebral asociadas al dolor como también producen una aumento en la frecuencia cardiaca y en la respiración (3). Las señales del dolor también pasan por la médula rostral ventromedial donde el sistema mensajero del dolor puede ser modificado (4).
Fuente: Brain Briefings