Fuente: El Ancasti
Con esta herramienta buscan eliminar las larvas del mosquito transmisor del dengue en los criaderos. Los especialistas ya están realizando evaluaciones en zonas de la capital tucumana.
Investigadores del CONICET NOA Sur (incluye a las provincias de Catamarca, Tucumán y Santiago del Estero) desarrollaron un biolarvicida que se puede utilizar para combatir la proliferación de los criaderos del mosquito transmisor del dengue. Esta nueva herramienta fue desarrollada mediante un convenio entre los investigadores del organismo nacional y la cartera sanitaria tucumana.
Augusto Bellomio, director del CONICET NOA Sur, en diálogo con Mañana Central de Radio Ancasti, explicó que este biolarvicida es uno de los desarrollos que se está aplicando y que consiste en una bacteria muy resistente a condiciones climáticas ambientales extremas, por lo que no requiere ser guardado en lugares refrigerados, entre otras características.
Bellomio explicó que esta bacteria espora, erosiona y esas bacterias producen una toxina que son consumidas por las larvas del Aedes Aegypti que luego las mata. “Entonces, un biolarvicida actúa sobre la larva porque los insecticidas que se aplican por fumigación matan a los insectos adultos, los que vuelan”, agregó.
“El biolarvicida se deposita por ejemplo en los pequeños recipientes o contenedores. La idea es comenzar a aplicarlo por fumigación y en el agua para eliminar las larvas que se encuentran allí”, señaló el especialista.
En este sentido, detalló que lo que proponen los investigadores tucumanos es hacer un formulado que permita ser aplicado por spray, aprovechando que es completamente inocuo tanto para las personas como para los animales y las plantas, entonces si de repente se empieza a fumigar y cae en el plato donde se alimenta una mascota, no pasa nada.
“Es una bacteria que normalmente se encuentra en el medio ambiente pero en menor cantidad como para producir un daño a los mosquitos, entonces se trata de aumentar su cantidad, su concentración para poder tener un efecto sobre las larvas”, explicó.
Aquí cabe señalar que en principio ese biolarvicida se aplicaba en comprimidos, entonces al ser aplicado en spray permitirá llegar a lugares como lagunas, piletas y demás sitios considerados focos y que por diferentes motivos no pueden acceder.
Continuidad y financiación
Por otro lado, Bellomio resaltó la importancia de que estos trabajos de investigación se realicen de forma continua “y que se puedan seguir llevando a cabo en la época en que desaparece el mosquito y la enfermedad deja de preocuparnos un poco, porque solo nos acordamos de esta enfermedad cuando hay muchos mosquitos y empezamos a tener una gran cantidad casos”.
En cuanto al financiamiento con el que cuentan en el organismo, señaló que “para que las investigaciones puedan llegar a la sociedad requieren de un esfuerzo continuado, un capital que hay que invertir para que se desarrollen las técnicas y tecnologías y eso tiene que ser continuado en el tiempo, no puede haber altibajos y desfinanciamientos como los que estamos sufriendo actualmente”.
Y, en este sentido, agregó “tenemos un presupuesto muy bajo asignado para la investigación, prácticamente nulo, tenemos para mantenernos solamente y le podría decir que ni eso, hay un recorte presupuestario muy alto, incluso hay personas que sus contratos no están siendo renovados y eso nos preocupa mucho”.
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